Qué es la obesidad grado 1: riesgos, síntomas y tratamientos

¿Qué es y qué significa obesidad “tipo 1” (grado 1)?

La obesidad grado 1 es el primer nivel de obesidad y es cuando el Índice de Masa Corporal se encuentra entre 30 y 34.9 kg/m2. Según la OMS, es un nivel de obesidad moderado. Sin embargo, en este grado el paciente tiene más probabilidades de desarrollar enfermedades metabólicas y cardiovasculares que los pacientes con sobrepeso. 

Algunos lo llaman “obesidad tipo 1”. Sin embargo, no es un término médicamente correcto; ya que en todos los grados la enfermedad es la misma, el exceso de grasa corporal. Por ejemplo, la diabetes tipo 1 y tipo 2 son diferentes porque en una el cuerpo no produce insulina, mientras que en la otra el cuerpo se vuelve resistente a ella. Son causas diferentes. 

En el caso de la obesidad, no podemos hablar de tipo 1, tipo 2 y tipo 3 porque la enfermedad es la misma. Lo que se clasifica es el grado o nivel de obesidad que tiene una persona, es decir, el exceso de peso que tiene una persona en relación a su peso; ya que mientras mayor sea el grado de obesidad, habrá mayores riesgos para la salud. 

La obesidad grado 1 no es lo mismo que el sobrepeso grado 1 o tipo 1. El sobrepeso es una fase posterior a la obesidad en el que el IMC se encuentra entre 26 y 29.9. Algunas clínicas también hacen clasificaciones del sobrepeso, pero no es una clasificación oficial. 

Tenemos un artículo completo donde hablamos sobre los tipos y grados de obesidad que existen. 

Síntomas de la obesidad grado 1

La obesidad grado 1 puede manifestarse con una combinación de síntomas físicos, emocionales y funcionales, que incluyen:

• Aumento visible del peso corporal: exceso de grasa corporal en áreas como el abdomen, caderas, muslos y otras partes del cuerpo.

• Dificultad para respirar: sensación de falta de aire al realizar actividades moderadas o al acostarse.

• Fatiga constante: cansancio o falta de energía debido al esfuerzo adicional que requiere el cuerpo.

• Dolor articular o muscular: presión sobre las articulaciones, especialmente en las rodillas, caderas y espalda.

• Sudoración excesiva: incluso con esfuerzos mínimos.

• Problemas en la piel: irritación o infecciones cutáneas en pliegues de la piel debido a la fricción o acumulación de humedad.

• Baja autoestima: insatisfacción con la apariencia física.

• Disminución de la capacidad física: dificultad para realizar actividades cotidianas como subir escaleras, caminar largas distancias o practicar deporte.

¿Cómo se ve la obesidad grado 1 en hombres y mujeres? 

Tanto en hombres como en mujeres la obesidad grado 1 se calcula a través del IMC. Dependiendo de la genética y de la distribución de la grasa, la obesidad grado 1 puede verse diferente en hombres y en mujeres. 

• Obesidad grado 1 en mujeres: en las mujeres la grasa suele acumularse en muslos, caderas y glúteos. Se le conoce como obesidad ginoide. Es más común en mujeres. 

• Obesidad grado 1 en hombres: los hombres suelen acumular grasa a nivel abdominal o visceral, y en la zona superior del cuerpo. También se le suele conocer como obesidad androide. Y es más común en hombres que en mujeres, pero depende mucho de la genética de cada persona. 

Riesgos de la obesidad grado 1

1. Enfermedades cardiovasculares: como hipertensión arterial y enfermedades del corazón.

2. Diabetes tipo 2 y otras alteraciones metabólicas: un riesgo significativo provocado por la resistencia a la insulina.

3. Problemas articulares: como artrosis, debido al exceso de peso sobre las articulaciones.

4. Dificultades respiratorias: como apnea del sueño o dificultad para respirar durante el esfuerzo físico.

5. Colesterol alto: niveles elevados de colesterol LDL ("malo") o triglicéridos.

6. Inflamación crónica: resultado del exceso de grasa corporal.

7. Apnea del sueño: ronquidos fuertes o pausas en la respiración al dormir.

8. Problemas de movilidad: rigidez o dolor al moverse debido al peso adicional.

9. Otros problemas de salud: inflamación crónica, hígado graso, ciertos tipos de cáncer y problemas psicológicos como ansiedad o depresión.

Prevención de la obesidad grado 1

La prevención de la obesidad grado 1 consiste en mejorar el estilo de vida que llevas.Sigue estos consejos: 

• Mantén un balance calórico: consume una cantidad de calorías adecuada para el nivel de actividad física que tienes.  

• Ten una alimentación equilibrada: prioriza frutas, verduras, cereales integrales, legumbres y proteínas magras. Reduce el consumo de alimentos ultra procesados, ricos en grasas saturadas, azúcares y sal y aumenta la ingesta de fibra (que ayuda a controlar el apetito y mejora la digestión).

• Controlar el tamaño de la porción: evita comidas excesivas, y organiza bien tus comidas dando prioridad a proteínas magras, verduras y fibra.

• Realiza ejercicio físico de forma regular: al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada o 75 minutos de ejercicio intenso. Eso sí, siempre considerando tu capacidad física y tu condición para evitar lesiones. 

• Incorporar a tus rutinas de ejercicio: actividades como caminar, correr, nadar, andar en bicicleta o practicar deportes.

• Mantenerte activo: usa escaleras en lugar de ascensores o camina en lugar de conducir distancias cortas. Aumenta tus pasos diarios, realiza cualquier tarea que aumente tu actividad física diaria. 

• Duerme lo suficiente: duerme entre 7 y 9 horas diarias. La falta de sueño afecta el equilibrio hormonal, puede aumentar el apetito y hacer propenso a acumular grasa abdominal.

• Maneja mejor el estrés: practica técnicas de relajación como meditación, yoga o respiración profunda. De modo que no tengas que recurrir a la comida como una forma de aliviar el estrés y la ansiedad. 

• Limitar el consumo de alcohol: evita la ingesta de bebidas alcohólicas, ya que contienen muchas calorías vacías.

• Evitar dietas restrictivas extremas: las dietas demasiado restrictivas no son sostenibles a largo plazo y pueden provocar un efecto rebote.

Qué es la obesidad: Causas, síntomas y factores de riesgo

¿Cómo combatir la obesidad grado 1? Tratamientos

El tratamiento de la obesidad es similar en prácticamente todos los grados, a excepción de la obesidad grado 3 que puede requerir otras alternativas adicionales. Estas algunas alternativas disponibles: 

Mejorar la alimentación y aumentar la actividad física

Según este estudio por R G Dyer, la alimentación y el ejercicio son factores fundamentales para la pérdida de peso sostenido a largo plazo. Después de todo, la obesidad es el desbalance que existe entre las calorías que consumimos y las calorías que gastamos (aunque es más complejo que eso). 

Por tanto, cualquier tratamiento de la obesidad grado 1 debe incluir ayuda para que el paciente pueda mejorar sus hábitos alimenticios y aumentar su actividad física. 

Esto no significa que el paciente deba seguir alguna dieta particular, ni que tampoco deba estar largas a la semana en el gimnasio. No es necesario adoptar ninguna dieta popular ni hacer entrenamientos intensivos (por lo menos si no es posible). 

Lo más importante es que el paciente aprenda a comer de una manera más saludable y con proporciones adecuadas, incluyendo grupos alimenticios adecuados, como una buena fuente de proteína, fibra, grasas saludables y carbohidratos complejos. 

En cuanto al ejercicio, cualquier aumento de la actividad física diaria puede ser un cambio importante. Incluso el caminar más o realizar tareas que requieran mayor esfuerzo físico. No obstante, los ejercicios de fuerza han demostrado ser los más idóneos para mejorar la composición corporal y perder peso de manera sostenida. 

Tratamiento médico

Sin embargo, el mismo estudio por R G Dyer  también demostró que la mayoría de los tratamientos tradicionales que solo se enfocan en los aspectos anteriores, tuvieron un éxito bastante limitado. 

Y es que existen muchos factores de riesgo que hacen que una persona sea más propensa a subir de peso o que tenga dificultad para adelgazar. Por esa razón, es importante dar un enfoque médico que permita detectar cualquier problema subyacente o factor de riesgo existente. 

• Desbalances hormonales

• Desbalances en la microbiota intestinal

• Apnea del sueño o mala calidad del sueño

• Algunos tratamientos médicos

• Déficits de ciertas vitaminas

• Ciertos tratamientos médicos

Apoyo psicológico  

Los factores emocionales y cognitivos también juegan un papel bastante importante en el aumento de peso. La mala relación con la comida, la ansiedad por comer, trastornos alimenticios y hábitos poco saludables pueden influir de manera importante. 

Recibir apoyo cognitivo conductual por un profesional de la salud puede ser de gran ayuda.

Tratamiento integral

El tratamiento integral es un enfoque revolucionario que considera que la obesidad es un multifactorial y que tratar todos los ángulos al mismo tiempo puede ser la mejor manera de aumentar la efectividad del tratamiento y que los resultados se mantengan a largo plazo. 

El tratamiento integral incluye un enfoque multidisciplinario para tratar la obesidad desde un ángulo médico, nutricional, psicológico y de entrenamiento físico; permitiendo tratar la raíz del problema. 

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