¿Cuáles son los efectos secundarios de la tirzepatida?
La tirzepatida (cuyo nombre comercial es Mounjaro), es un medicamento que ayuda a controlar la diabetes mellitus tipo 2 y contribuye con la pérdida de peso corporal, pero como todo tratamiento, puede tener efectos secundarios.
¿Qué debes saber antes de considerar su uso? De eso hablaremos en el siguiente artículo de Lonvital, en el que te contaremos todo sobre los efectos secundarios de la tirzepatida, para que tomes decisiones informadas.
¿Por qué la tirzepatida produce efectos secundarios?
La tirzepatida actúa imitando las hormonas que controlan el azúcar en la sangre y el apetito. Al estimular estos mecanismos naturales, el medicamento ayuda a reducir los niveles de glucosa y a sentirte más lleno, facilitando así la pérdida de peso. Sin embargo, esta potente acción puede causar algunos efectos secundarios, que detallamos a continuación.
¿Cuáles son los efectos adversos de tirzepatida?
Los efectos secundarios de la tirzepatida se dividen en comunes y graves, dependiendo de la intensidad y la frecuencia con la que se presentan.
Efectos secundarios comunes de la tirzepatida (y cómo aliviarlos)
Los efectos secundarios más comunes de la tirzepatida generalmente se presentan al inicio del tratamiento, y luego disminuyen una vez que el cuerpo se ha acostumbrado a la dosis.
Como la tirzepatida actúa a nivel estomacal, los malestares gastrointestinales son los más comunes.
Náuseas: come porciones pequeñas y frecuentes, evitando alimentos grasos o muy condimentados. Bebe líquidos en sorbos pequeños para evitar la deshidratación. Evita acostarte inmediatamente después de comer.
Vómitos: mantente hidratado con soluciones electrolíticas o agua en pequeñas cantidades.Consume alimentos suaves como arroz, plátanos o pan tostado cuando te sientas mejor. Consulta a tu médico si los vómitos son frecuentes o severos, ya que podrían requerir ajuste de dosis o medicamentos antieméticos.
Diarrea: bebe líquidos claros (agua, caldos o soluciones rehidratantes) para prevenir la deshidratación. Evita alimentos ricos en fibra, lácteos y bebidas con cafeína. Consulta al médico si la diarrea persiste o es severa.
Dolor abdominal o estomacal: aplica una compresa tibia en el abdomen para aliviar el malestar. Evita comidas pesadas, grasosas o irritantes. Si el dolor es intenso o frecuente, consulta al médico.
Exceso de gases intestinales: reduce el consumo de alimentos que producen gases, como legumbres, brócoli y bebidas carbonatadas. Mastica lentamente para evitar tragar aire al comer.
Eructos frecuentes: Evita bebidas carbonatadas y el uso de pajitas al beber. Mastica bien los alimentos y come despacio. Mantén una postura erguida después de comer para facilitar la digestión.
Reflujo gastroesofágico (sensación de ardor o acidez en el pecho): Evita alimentos ácidos, picantes, grasos y bebidas con cafeína o alcohol. Come porciones pequeñas y no te acuestes inmediatamente después de comer. Eleva ligeramente la cabecera de tu cama para evitar el reflujo mientras duermes. Consulta a tu médico sobre el uso de antiácidos si el reflujo persiste.
Estreñimiento: incrementa el consumo de fibra en la dieta, con alimentos como frutas, verduras y cereales integrales. Bebe suficiente agua para mantener la hidratación. Realiza actividad física moderada para estimular el tránsito intestinal. En casos persistentes, consulta al médico sobre el uso de laxantes suaves.
Hinchazón abdominal (sensación de plenitud o distensión): reduce el consumo de alimentos que generan gases. Come lentamente y evita masticar chicle, ya que puede aumentar la ingesta de aire. Realiza masajes circulares en el abdomen para aliviar la distensión.
Fatiga: asegúrate de dormir lo suficiente y mantener un horario regular de sueño. Consume alimentos ricos en nutrientes, como proteínas magras, frutas y verduras. Realiza ejercicios ligeros, como caminar, para mejorar los niveles de energía. Consulta al médico si la fatiga persiste, ya que podría ser signo de otra condición subyacente.

Efectos secundarios graves de la tirzepatida
Reacciones alérgicas: urticaria, dificultad para respirar o hinchazón de la cara, labios, lengua o garganta, que requieren atención médica inmediata.
Pancreatitis: inflamación del páncreas, caracterizada por dolor intenso en la parte superior del abdomen que puede irradiarse a la espalda, acompañado de náuseas y vómitos.
Alteraciones en los niveles de glucosa en sangre:
Hipoglucemia: descenso excesivo del azúcar en sangre, que puede provocar mareos, sudoración o confusión.
Hiperglucemia: aumento excesivo del azúcar en sangre, con síntomas como sed extrema y micción frecuente.
Riesgo de tumores de células C de la tiroides: especialmente en personas con antecedentes personales o familiares de cáncer de tiroides medular o síndrome de neoplasia endocrina múltiple tipo 2.

Precauciones
Es fundamental que en caso de que experimentes cualquiera de estos efectos adversos, especialmente los graves, informes de inmediato a tu médico.
Contraindicaciones de tirzepatida
La tirzepatida está contraindicada en ciertas situaciones y para ciertos grupos de personas debido a riesgos potenciales para la salud, como:
Hipersensibilidad al medicamento: está contraindicada en personas con alergia o sensibilidad conocida a la tirzepatida o a cualquiera de los excipientes de la fórmula.
Antecedentes de tumores de células C de la tiroides: No se debe usar en pacientes con antecedentes personales o familiares de cáncer medular de tiroides y/o síndrome de neoplasia endocrina múltiple tipo 2 (MEN2).
Pancreatitis activa o antecedentes de pancreatitis: pacientes que hayan presentado inflamación del páncreas (pancreatitis) no deben usar tirzepatida debido al riesgo de recurrencia.
Insuficiencia renal grave: en casos de insuficiencia renal severa o enfermedad renal terminal, el medicamento puede acumularse en el cuerpo, aumentando el riesgo de efectos adversos.
Insuficiencia hepática severa: aunque no es una contraindicación absoluta, debe usarse con precaución o evitarse en pacientes con daño hepático severo.
Menores de edad: no está indicada para personas menores de 18 años, debido a la falta de estudios en este grupo.
Embarazo y lactancia: está contraindicada durante el embarazo, ya que los datos disponibles son limitados y el medicamento puede afectar al desarrollo fetal. También se debe evitar durante la lactancia, ya que no se conoce si se excreta en la leche materna.
Hipoglucemia recurrente: pacientes que sufren episodios frecuentes de hipoglucemia deben usarla con precaución, especialmente si están en tratamiento con insulina u otros antidiabéticos.
Trastornos gastrointestinales graves: personas con gastroparesia severa o alteraciones de la motilidad intestinal no deben usar tirzepatida, ya que este medicamento puede agravar los síntomas.

¿Cuándo empiezan los efectos secundarios de la tirzepatida?
Los efectos secundarios de tirzepatida generalmente comienzan poco después de iniciar el tratamiento, especialmente durante las primeras semanas, mientras el cuerpo se adapta al medicamento. Sin embargo, la aparición y severidad de estos efectos pueden variar según la dosis administrada, la tolerancia individual del paciente y su historial médico.
¿Cuánto duran los efectos secundarios de la tirzepatida?
La duración de los efectos secundarios de la tirzepatida varía entre pacientes y depende de factores como la dosis, la tolerancia individual y la capacidad del cuerpo para adaptarse al medicamento.
¿Cómo evitar/reducir los efectos secundarios de la tirzepatida?
Si estás empezando con tirzepatida o llevas tiempo con este tratamiento y quieres minimizar los efectos secundarios, te recomendamos seguir estos consejos:
Inicia con dosis bajas
El especialista te indicará iniciar con la dosis más baja para que tu cuerpo se vaya adaptando poco a poco al medicamento. No te apresures ni te saltes las indicaciones de tu médico; esto podría hacer que los efectos secundarios sean más intensos. Sigue el esquema recomendado y recuerda que este proceso es gradual.
NUNCA utilices este medicamento sin supervisión médica.
Realiza actividad física moderada
El ejercicio suave puede ayudarte a mejorar tu tránsito intestinal y a reducir síntomas como el estreñimiento o la hinchazón. Una caminata diaria o yoga ligero son suficientes para sentirte mejor. Si estás cansado, escucha a tu cuerpo y evita actividades extenuantes hasta que recuperes energía.
Elige el momento adecuado para la inyección
El horario de tu inyección puede influir en cómo te afecta el medicamento. Sigue las recomendaciones de tu médico y, si notas que los efectos secundarios interfieren con tus actividades diarias, habla con él para ajustar el momento de la administración. Este pequeño cambio puede hacer una gran diferencia.
Lleva un registro de tus síntomas
Toma nota de los efectos secundarios que experimentes, cuándo empiezan y cuánto duran. Este registro te ayudará a identificar patrones y proporcionará información útil a tu médico para ajustar el tratamiento si es necesario.
Recuerda: consulta con tu especialista médico si alguno de estos síntomas empeoran o son insoportables. Probablemente, sea necesario cambiar el medicamento o suspenderlo por completo.

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