Efectos secundarios de Saxenda | ¿Cuáles son y cómo evitarlos?

La lucha contra la obesidad es un camino que muchos han emprendido buscando mejorar la salud y calidad de vida. 

Saxenda, un medicamento inyectable que contiene liraglutida, la cual ayuda con la regulación de la insulina, pero también retrasa el vaciado gástrico y reduce la ansiedad por comer.  

Sin embargo, como sucede con cualquier otro fármaco, Saxenda puede producir efectos secundarios, especialmente mientras que el cuerpo se acostumbra a la fosis. 

En este artículo abordaremos de manera clara y sencilla todo lo que necesita saber sobre los efectos secundarios de Saxenda: especialmente, cómo tratarlos si tienes alguno de ellos. 

¿Por qué Saxenda produce efectos secundarios?

Saxenda funciona imitando la acción de una hormona natural llamada GLP-1 (péptido similar al glucagón tipo 1), que regula el apetito y el vaciado gástrico. Al activar estos procesos, Saxenda ayuda a reducir el consumo de alimentos y a controlar el peso. 

Sin embargo, esta acción también puede interferir con el funcionamiento normal del tracto digestivo, el páncreas y otros órganos, lo que puede provocar efectos secundarios.

Es importante recordar que cada organismo responde de manera diferente a los medicamentos. Mientras que algunos podrían experimentar efectos secundarios leves o ningún efecto, otros podrían enfrentarse a efectos secundarios a largo plazo o severos. 

Por esto, es muy importante que el uso de este medicamento siempre esté bajo indicación y supervisión médica, para tratar y evitar los efectos secundarios; o en el peor de los casos, suspender la medicación si los efectos secundarios persisten o son muy graves. 

¿Cuáles son los efectos secundarios de Saxenda?

Los efectos secundarios de Saxenda pueden variar desde los más comunes y leves hasta los más graves y raros. Es fundamental entender cada uno de ellos y saber cómo abordarlos.

Efectos secundarios frecuentes de Saxenda

1. Dolor de cabeza: Este es uno de los efectos secundarios de Saxenda más comunes y, generalmente, leve. Para aliviarlo, recomendamos mantenerte bien hidratado, descansar adecuadamente, y evitar las pantallas. 

2. Náuseas: Las náuseas son habituales al iniciar el tratamiento, ya que el cuerpo se está adaptando. Para minimizarlas:

   • Come porciones pequeñas y frecuentes en lugar de grandes comidas.

   • Evita alimentos grasos o muy condimentados.

   • Mantente hidratado. 

   • Si las náuseas persisten, consulta a tu médico para ajustar la dosis o suspender el medicamento. 

3. Vómitos: Este efecto secundario puede estar relacionado con las náuseas. En caso de vómitos, procura reponer líquidos con soluciones de rehidratación oral y evitar alimentos sólidos hasta que se controle el malestar. Si el vómito es persistente, busca atención médica.
   Diarrea: este es uno de los síntomas más frecuentes y suele ser transitorio. Para controlarla:

   • Evita alimentos ricos en fibra insoluble y productos lácteos.

   • Bebe abundante agua para evitar la deshidratación.

   • Si la diarrea es intensa o prolongada, consulta a tu médico.

4. Estreñimiento: En algunos casos, el efecto puede ser el opuesto. Para aliviar el estreñimiento como efecto secundario de Saxenda: 

   • Aumenta el consumo de fibra soluble (frutas, verduras y cereales integrales).

   • Mantén una rutina de ejercicio físico.

   • Hidrátate correctamente.

   • Si el problema persiste, es importante que acudas a un médico. 

5. Dolor abdominal: Este puede ser resultado de los cambios en el sistema digestivo. Aplicar compresas tibias en el abdomen y evitar alimentos irritantes (como cafeína y alimentos grasos) puede ayudar. Si el dolor es intenso o persistente, es esencial que busques atención médica.

NOTA: los efectos secundarios a nivel gastrointestinal son lo más comunes porque Saxenda actúa a nivel gastrointestinal, y por eso, es probable que puedas experimentar algunos de estos síntomas de forma temporal mientras tu cuerpo se acostumbra a la dosis. Es importante seguir las recomendaciones médicas, acompañando con una dieta adecuada para Saxenda. 

Efectos secundarios graves de Saxenda

Aunque menos frecuentes, estos efectos requieren atención médica inmediata:

1. Pancreatitis (inflamación del páncreas):

   • Los síntomas incluyen dolor abdominal severo que puede irradiarse hacia la espalda, náuseas y vómitos.

   • Si sospechas de pancreatitis, suspende el tratamiento y busca atención médica de inmediato.

2. Enfermedad de la vesícula biliar (como cálculos biliares):

   • Síntomas como dolor en la parte superior derecha del abdomen, fiebre o ictericia pueden indicar un problema.

   • Es fundamental buscar atención médica y, en algunos casos, podría ser necesario suspender el tratamiento.

3. Insuficiencia renal (disfunción renal):

   • Los signos incluyen reducción en la cantidad de orina, hinchazón en piernas y pies, y fatiga extrema.

   • Informa a tu médico ante cualquier sospecha para evitar complicaciones mayores.

4. Aumento de la frecuencia cardíaca:

   • Puedes experimentar palpitaciones o sensación de aceleración del corazón.

   • En estos casos, es importante monitorear la frecuencia cardíaca y reportar cualquier anomalía a tu médico. 

Recomendación: la revisión médica previo al uso del medicamento es esencial para reducir todos estos efectos secundarios. Especialmente, para determinar si tienes alguna de las siguientes contraindicaciones.

Contraindicaciones de Saxenda

Saxenda no está indicado para todos. No debería ser utilizado por:

• Personas con antecedentes de pancreatitis.

• Pacientes con historial de cáncer de tiroides medular o síndrome de neoplasia endocrina múltiple tipo 2 (MEN 2).

• Mujeres embarazadas o en período de lactancia.

• Personas alérgicas a la liraglutida o a cualquiera de los componentes del medicamento.

Siempre es crucial mantener informado a tu médico sobre cualquier condición médica o medicamentos que estés tomando antes de iniciar un nuevo tratamiento.

¿Cuándo empiezan los efectos secundarios de Saxenda?

Los efectos secundarios suelen aparecer en las primeras semanas del tratamiento, especialmente durante el aumento gradual de la dosis. 

Esto se debe a que el cuerpo está adaptándose al medicamento. Generalmente, estos efectos disminuyen con el tiempo a medida que tu organismo se acostumbra.

¿Cuánto duran los efectos secundarios de Saxenda?

La duración de los efectos secundarios varía según la persona. En la mayoría de los casos, los síntomas como las náuseas y los problemas gastrointestinales desaparecen en unas pocas semanas.

Sin embargo, si los efectos persisten o empeoran, es fundamental consultar a tu médico. Él tomará la mejor decisión para ti, ya sea reducir la dosis, detener el tratamiento o tomar alguna otra medida. 

¿Cómo evitar los efectos secundarios de Saxenda?

Aunque no siempre es posible prevenir los efectos secundarios, hay algunas acciones que puedes llevar a cabo para reducir la sintomatología al máximo: 

• Inicia con dosis bajas y aumenta gradualmente: Este es el protocolo habitual y permite que el cuerpo se adapte al medicamento. Esta medida la decidirá tu médico, no realices ninguna modificación a tu tratamiento sin su aprobación. 

• Mantén una dieta saludable y equilibrada: Evita alimentos irritantes o grasos, y prioricemos comidas ligeras, altas en proteínas. 

• Hidrátate adecuadamente: Esto es clave para evitar problemas como el estreñimiento y la deshidratación causada por la diarrea.

• Presta atención a tu cuerpo: Si notas cualquier signo extraño, o no te sientes bien, por favor, dirígete a centro de salud o comunícate con tu médico. 

Efecto rebote de Saxenda

Uno de los desafíos al utilizar Saxenda es el riesgo de un efecto rebote, que se refiere al aumento de peso tras suspender el tratamiento. 

Este fenómeno ocurre porque, al dejar de usar el medicamento, tu cuerpo puede volver a sus patrones metabólicos previos si no habías incorporado cambios sostenibles en tu estilo de vida.

Y es que ni Saxenda ni ningún medicamento puede hacer milagros. Si cambias tu estilo de vida durante el uso del tratamiento, lo más probable es que recuperes el peso después de suspender el medicamento. 

Por eso es importante que sigas las siguientes recomendaciones: 

• Adopta hábitos alimenticios saludables: Mientras usas Saxenda, trabajaba en construir una alimentación equilibrada que puedas mantener a largo plazo. Evita depender únicamente del medicamento para controlar tu peso.

• Incorpora actividad física regular: El ejercicio no solo ayuda a mantener el peso, sino que también mejora tu bienestar general. Encuentra una actividad que disfrutes y será más fácil que te mantengas activo. 

• Establece rutinas sostenibles: Los cambios bruscos suelen ser más difíciles de mantener. Gradualmente integra hábitos que puedan convertirse en parte de tu vida cotidiana.

• Seguimiento médico continuo: Aunque hayas dejado de usar Saxenda, continúa visitando a tu médico o nutricionista. Eso es clave para ayudarte a seguir adelante. 

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